Argentina tiene una oportunidad ùnica, y hasta ahora el Ministerio de Defensa no la ha sabido aprovechar, sin embargo, la necesidad del cambio es imperante y hay que tomar decisiones ràpidas y efectivas.
El Pampa II es sòlo una solución intermedia, ya que con los recursos cada vez màs escasos en el àrea de Defensa, y con el incremento de los mismos, esta aeronave puede representar la gran diferencia a la hora a la hora de adquirir nuevas aeronaves, ya que no debemos olvidarnos que el principal medio de combate de la FAA (MIrage (Mirage III e IAI Finger) tienen como fin de la vida útil el año 2010.
Cuando se lanzò el programa Pampa se incluìa una seria de mejoras que no han sido tomadas en cuenta por el Ministerio de Defensa como el cambio de motor; la provisiòn de un sistema làser en el morro del aviòn (lo que le permitirìa el lanzamiento de bombas guiadas por làser, algo que la FAA se desconoce totalmente); un sistema de reabastecimiento en vuelo y un sistema de alerta radar.
La tercera fase del programa incluìa la instalación de un radar multimodo APG-67 v(4), lo que le permitiría también la instalaciòn de misiles aire-aire y aire-tierra, incluso de aquellos con un alcance màs allà del horizonte.
La FAA estarà concentrada en los próximos años con dos Escuadrones de Caza de cada una de las aeronaves operativas. El del aviòn que reemplace a los Mirage, el de A-4AR Fighinghawk y el del IA.58 Pucarà.
El AT-63 Pampa tiene una oportunidad única. Costo operativos muy bajos, una nueva planta motriz con un 30 por ciento màs de empuje (TFE-731-40R), es un aviòn ataque ligero capaz de sobrellevar cualquier tipo de misiòn, y lo màs importante, està fabricado en el propio paìs.
Fuerza Aérea Argentina